En la anterior entrada ya os hablamos acerca de qué nos había pasado en los incontables viajes que hicimos, pero, ¿cuántos viajes hicimos realmente?
Pues sí, los contamos (de hecho fue Albertico el que lo hizo):
3 vuelos cogimos los tres juntos. Deberíamos añadir el vuelo a París, los vuelos de vuelta a casa de Albertico o Polo o el vuelo de Miguelito a Birmania.
11 veces alquilamos una bici con la que pasamos todo el día.
14 viajes en barco, ya sea en mar, ya sea en río.
13 buses urbanos, todos en grandes ciudades (obviamente).
7 Songthaews, todos ellos en Tailandia.
13 tuk-tuks, aunque no los cogimos en zonas turísticas. De todas formas, seguramente pagamos más de lo que habríamos debido!
16 veces cogimos el metro, incluyendo París, Hong Kong y Singapur.
1 tren, sólamente 1, pero uno famoso, el Tren de la Jungla en Malasia.
11 trenes urbanos, un estilo tranvía o monoraíl. La mayoría en Kuala Lumpur.
5 barcos urbanos. Sí, este tipo de transporte urbano también existe.
25 veces nos subimos a un coche. No condujimos nunca, y de entre las 25 veces, 13 fueron autostop.
7 veces subimos a una moto, descubriendo la belleza de las provincias del Sureste Asiático.
30 veces pillamos un taxi. Ais, ¡tan barato por allí!
14 furgonetas (minibuses), incluyendo la que pinchamos.
Y el plato fuerte, la verdadera experiencia de estos 100 días de viaje:
47 buses, algunos malos, ¡otros incluso peores!
Pasamos taaaantas horas viajando: Alrededor de 220 horas viajando, significando 9 días únicamente en trayecto (las cifras son aproximativas, aunque muy probablemente el número real sea superior).
Eso es muuuucho tiempo.